4 Enero 2021

Hapag-Lloyd ha hecho un pedido de 1.000 millones de dólares para seis portacontenedores de GNL de doble combustible y 23.500 TEU en Daewoo Shipbuilding & Marine Engineering (DSME). Las seis nuevas construcciones de más de 23.500 teu serían entregadas por DSME entre abril y diciembre de 2023.

Los ULCVs contratados a un costo de 1.000 millones de dólares, estarán equipados con motores de alta presión de doble combustible diseñados para operar con GNL, pero también con suficiente capacidad de tanque de combustible para operar con fuel oil marino convencional.

"Con la inversión en seis buques portacontenedores ultra grandes, no solo podremos reducir los costos de espacio y mejorar la competitividad en el comercio, sino también dar un paso significativo en la modernización de nuestra flota".

"Además, reduciremos aún más nuestro impacto ambiental".

Rolf Habben Jansen , :CEO de Hapag-Lloyd

Hapag-Lloyd tiene experiencia en la operación de buques propulsados por LNG, habiendo convertido uno de los 17 buques "LNG-ready" que heredó de su fusión con UASC. Sin embargo, se entiende que la adaptación del Sajir de 15.000 teu ha costado más de 30 millones de dólares, descartando cualquier otra conversión.

Los nuevos serán desplegados en el servicio de la Alianza de Asia a Europa, donde ya operan 71 ULCVS de las grandes compañias. Optar por construcciones nuevas a gas en la era de la descarbonización pone a Hapag-Lloyd en el mismo campo que la compañia CMA CGM de la Alianza Oceánica, la cual recibió el primero de nueve buques de 23,000 teu propulsados por GNL en septiembre.

Sin embargo, otros operadores como el líder del mercado Maersk, sostiene que el GNL no es la respuesta a largo plazo para reducir las emisiones. Al respecto el CEO de Maersk comentó sugirió que tales buques representaban un "riesgo tecnológico", diciendo: "No creemos que el GNL vaya a jugar un gran papel para nosotros como combustible de transición, porque sigue siendo un combustible fósil. Preferiríamos ir directamente a un combustible de tipo CO2-neutral". Su socio en 2M, MSC, también ha dicho que no invertiría en GNL para ninguno de sus nuevas construcciones , alegando que "no es una opción viable".

Hapag-Lloyd participa en la THE Aliance , su aliado ONE (Ocean Network Express.Ltd) ha anunanciado tambien a final de 2020 el pedido de 6 nuevos buques ULCV de 24.000 TEU. En este caso e ONE ha optado por combustible convencional y scrubbers. Aunque no esta claro el grado de cumplimiento de estos buques de los objetivos de reducción de GHG, ONE declara que sus buques reducen "significativamente" las emisiones de carbono mediante un diseño del casco "estado del arte" que maxiza la carga y minimiza el consumo.